Los geru (potencialmente traducido como Geeru o Gale) son lagartos guerreros que aparecen en Zelda II: The Adventure of Link. Son muy similares en apariencia a los lizalfos. Luchan principalmente con mazas y se defienden con un escudo. Son los enemigos más fuertes que Link enfrentará fuera de las mazmorras en el juego, y luchar con ellos es similar a luchar con Nudillos de Hierro. Los geru parecen altamente organizados, y la mayoría de ellos se encuentran en los valles de Hyrule oriental, donde atacan por encima de paredes altas, y muchos también habitan el Valle de la Muerte, antes de llegar al Gran Palacio. Se pueden encontrar comúnmente en bosques y cementerios. No aparecen en los palacios, así que probablemente no son seguidores de Ganon.
Un geru que vive en la Isla del Laberinto había secuestrado al hijo de una anciana del Pueblo de Darunia por razones desconocidas, y Link debe rescatarlo.
Los geru aparecen en formas de naranjas, rojas y azules, cada uno con un comportamiento ligeramente diferente. Tanto los rojos como los azules van armados con mazos (que no pueden ser rechazados por el escudo de Link, a no ser que este use el Hechizo de reflejo), sin embargo el azul también tiene la capacidad para lanzar su arma, convirtiéndolo en uno de los más fuertes y más peligrosos enemigos en el juego. Los naranjas llevan lanzas que se pueden bloquear con escudo de Link, y pueden dar ataques altos y bajos, así como los Nudillo de Hierro.
Todos los geru portan escudo, lo que hace muy difícil dañarlos. Mientras es posible evitar el ataque de los geru rojos poniéndose fuera del alcance de su maza, el geru azul puede mantener su distancia y lanzando su arma, por lo que se recomienda usar magia para pelear contra ellos. Algunos geru rojos aparecen parados sobre muros, y lanzan piedras hacia Link. Estos Geru no puede ser atacado por medios normales, y sólo puede ser destruidos con el Hechizo de trueno. Los rojos y naranjas comúnmente se encuentran en cuevas y zonas de bosque de Hyrule Suroriental, sin embargo, los azules habitan en terrenos más oscuros, como el cementerio, o el Valle de la Muerte.
Etimología[]
Su nombre proviene de la palabra gekko, una familia de reptiles.
Véase también[]
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